« Un niño que se lava
los dientes regularmente aceptará mejor los cuidados dentales »
Explique al niño porqué
debe lavarse los dientes. Puede hacerlo de manera imaginaria o contándole una
historia corta.
Es preferible lavarse
los dientes 3 veces por día (después de cada comida) pero el cepillado más
importante es el de la noche.
Utilice secuencias visuales para descomponer el gesto del cepillado y hacer una rutina previsible para el niño:
« Si tengo los dientes
sucios, tengo un mal aliento. Los dientes sucios no son bonitos. Los dientes sucios pueden hacer que
caiga enfermo o dolerme. Me cepillo los dientes todos los días para tener
bonitos los dientes y estar en plena forma»
Puede crear también un
escenario social personalizado haciendo
sus propias fotos del niño lavándose los dientes creando una historia.
Adapte el cuarto de
baño para dar al niño todas las informaciones y hacerle el gesto más fácil si
lo hace solo (Time Timer, reloj de arena, secuencia visual con pictogramas o
fotografías…)
Puede ser preferible
para el niño sentarse cuando se cepilla los dientes, sobre todo si tiene
problemas de coordinación o postura.
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