1- Establecer una rutina consistente
No tiene que ser estricta ni muy detallada, hasta una simple lista de actividades puede ayudar a anticiparse y aliviar la ansiedad.
2- Hablar al respecto
Hacer preguntas abiertas que nos permitan conversar sobre cómo se siente, previendo cambios en la rutina para la semana.
3- Dormir lo suficiente
Suena simple y obvio, pero muchos chicos no duermen lo suficiente. Es importante tener un horario consistente para acostarse y levantarse, incluso los fines de semana.
4- Aportar energía al cuerpo
Brindar comidas y snacks saludables que ayuden a desarrollar el cerebro y el cuerpo, pero también podemos planear comidas especiales "cada tanto" ¡Todo es cuestión de equilibrio!
5- Tener algo que esperar
Ya sea planear una película en familia un Viernes a la noche o tomar un helado después de las clases del miércoles a la tarde, incorporemos u plan divertido en la semana que entusiasme a tu hijo.
6- Ayúdalos a armar su mochila o su lugar de estudio la noche anterior
Esto los ayuda a asegurarse que no se olvidan nada y tienen una cosa menos de la que preocuparse durante la rutina de la mañana siguiente.
7- Planear un rato de tiempo de calidad para conectar
Ya sea una caminata a la plaza, acurrucarse en el sillón o mientras se bañan, pasar un rato con nuestro hijo puede ayudarlo a que se sienta más tranquilo y seguro para encarar el día.
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